Opel Kapitan de 1940

El coche un millón de Opel, una berlina Kapitan nacida en octubre de 1940, inauguró una especie de tradición por la cual la mayoría de las unidades con las que se alcanzaron registros significativos para la marca correspondieron a modelos de gama alta.
El Opel Kapitan era uno de los coches con los que la marca, a finales de la década de 1930, desafiaba a las más reputadas firmas del segmento de los automóviles de clase superior, ofreciendo un nivel de calidad y de acabados elevado por un precio muy contenido. Con este modelo, la marca disponía de un coche de seis cilindros a la altura de la competencia.
Además de su carrocería autoportante, el Opel Kapitan disfrutaba de suspensión delantera independiente, amortiguadores hidráulicos, refrigeración líquida con ventilador eléctrico y un sistema de desempañado del parabrisas, todos ellos elementos que causaban sensación en aquella época. Por no hablar de las «grietas para el sonido» que, como explicaba el catálogo de la época, eran “salidas” para la “fuente de sonido”. Sí, la radio y el amplificador habían encontrado ya su hueco en el Opel Kapitan.